Aprende todo sobre el monstruo Equidna la madre de todas las bestias

En la mitología griega, Equidna era una monstruosa ninfa, a quien la historia antigua la ubica como la madre de los monstruos más importantes que existieron en la mitología tanto griega.

 

Origen de Equidna

El origen de Equidna viene del griego antiguo que significa “víbora”. Llamada muchas veces como Drakaina Delphyne que significa “vientre de dragona”.  Su fisionomía era con el cuerpo de una bella mujer como la mayoría de las ninfas pero de aterradores ojos oscuros y en la parte posterior una cola de serpiente. (Ver articulo: Alcetis)

Como la mayoría de las criaturas mitológicas, su origen tiene varias versiones. En unas leyendas se dice que Equidna es hija de Forcis, un dios marino y Ceto un monstruo marino en forma de ballena. Otro de los relatos indica que es hija de Tártaro el asentamiento del inframundo junto a la diosa Gea, la madre tierra.

 

En la leyenda de Equidna incluye otra vertiente donde se explica a qué se debe su forma monstruosa, relatando sus padres fueron la ninfa acuática Calírroe , hija del dios Océano y de la diosa marina Tetis, junto a Crisaor, un extraordinario guerrero que nació de la sangre de Medusa cuando Perseo la mato cortándole la cabeza, y luego se transformó en una enorme serpiente. (Ver articulo: Medusa en la mitología griega)

Esta última teoría es negada por otros autores donde aparece En diversos Equidna como la madre de Calírroe y de Medusa y no al contrario, sin embargo no hacen referencia a si el padre de éstas es Tifón o Heracles que son las parejas con las que la mitología la relaciona.

 

Relación de Equidna y Tifón

Se dice que Equidna junto a Tifón son los padres de los monstruos más importantes de los mitos griegos. Tifón es una divinidad originaria de Grecia, un gigante relativo a los torbellinos. Fue el último hijo de la diosa Gea con Tártaro. Es conocido porque intentó destruir al dios Zeus en venganza por haber derrotado a los Titanes.

 

Equidna acompaño a Tifón en el ataque al Olimpo pero Zeus los derrotó, sin embargo les perdono la vida y dejo que siguieran viviendo así como a sus hijos, como un ejemplo para los héroes que quisieran retarlo. Desde ese entonces, vivió en una cueva desértica.

Se dice que fue muerta por el gigante Argos, el mítico guardián que tenía cuatro ojos, quien la sorprendió mientras dormía dentro de su cueva.

La descendencia de Tifón y Equidna

Equidna y Tifón fuero los padres de los monstruos más importantes que registra la mitología griega entre ellos está Cerbero, llamado también el perro infernal, tenía 3 cabezas y era guardián de las puertas del inframundo. Ortro, un perro de dos cabezas parecido al Cerbero. Quimera también fue hija de la pareja, un monstruo mágico representado con cabeza de león, cuerpo de cabra y cola de dragón.

Sigue la lista con la Esfinge, que era un demonio de destrucción y símbolo de la mala suerte. Se representaba con el rostro de mujer, cuerpo de león y alas de ave. También está la Hidra de Lerna, un antiguo y despiadado monstruo acuático tipo espirito del inframundo, con forma de serpiente con numeras cabezas, desde tres e incluso diez mil, contentiva de un aliento venenoso que era su arma de ataque.

Otro de los descendientes de Equidna y Tifón era Ladón, la serpiente de las Hespérides, también el León de Nemea, un monstruo a quien los mortales no podían hacerle daño y que su muerte fue encargada como uno de los doce trabajos de Hércules para poder ser perdonado por darle muerte a su esposa e hijos.

El Águila de Prometeo, un águila gigante. El Dragón de la Cólquida que se distinguía por tener un larguísimo cuello e incontables anillos como una serpiente. La Cerda de Cromión, una lechona horrorosa que infundía terror en los habitantes de Cromion.

Equidna y Heracles

Como todo monstruo mitológico, Equidna tenía entre sus características ser vengativa, por lo que en una ocasión, asaltó al héroe Héracles durante uno de sus viajes quitándole un ganado. Al reclamarle y exigirle Hércules que se los devolviera, ésta pidió a cambio que tuviese relaciones sexuales con ella. Héracles accedió y de esa unión nacieron tres hijos, Agatirso, Gelono y Escites.

 

Heracles les dijo a sus hijos una tarea, que doblar su arco y apretase el cinturón como él lo hacía, y si uno de los tres lo lograba, ese se convertiría en el gobernante del país, mientras que los otros dos serian desterrados.

Del broche del cinturón colgaba una copa de oro que sería el trofeo adicional para el ganador.  Escites fue el único que logró cumplir el reto y así se convirtió en gobernante del país. Desde entonces, llevar colgando una copa de oro en el cinturón se volvió una tradición en todos los reyes escitas.

Actualizado el 23 abril, 2020