Los Toltecas eran un pueblo de carácter guerrero y politeísta, fueron nómades hasta la conquista de Teotihuacán donde se asentaron el el año 750 d.C. Tienen una interesante historia mítica y arqueológica, en este artículo veremos mucho más sobre esta fascinante cultura.
Características de los Toltecas
Los Toltecas fueron una poderosa civilización donde sus primeros registros se encuentran a mediados del siglo VII. Son uno de los pilares más fuertes para las civilizaciones posteriores en la época Precolombina en toda Mesoamérica. El término Tolteca significa “maestros constructores”.
Se considera al pueblo Tolteca el antecesor de la gran cultura Azteca, ya que estos los mencionan entre sus tradiciones considerándolos parte de su pasado. Estos mitos y leyendas se han ido trasmitiendo de generación en generación de forma oral.
Fueron un pueblo nómade que logra asentarse en el año 750 d.C. en la ciudad de Teotihuacan y luego colonizaron la Meseta Central de México. Desde ahí comenzaron a forjar los cimientos de su cultura. La religión siempre fue un factor predominante en ellos que guiaba al pueblo, pero con el paso del tiempo se fueron transformando en un pueblo guerrero y orientado a la conquista, dándole mucha importancia a sus grandes guerreros.
El apogeo de la cultura Tolteca fue entre el 800 y el 1200 d.C. En este período la casta militar era una de las cosas más importantes, pero no olvidaron la religión como base fundamental de su cultura. Eran un pueblo politeísta, es decir que creían en la existencia de varios dioses, realizaban elaborados rituales adorando los elemento de la naturaleza. Otra de las figuras importante de este pueblo eran los chamanes, que eran respetados, admirados y gozaban de grandes privilegios dentro de su sociedad, ya que su palabra era ley.
La figura religiosa más importante para el pueblo tolteca era Quetzalcóatl una serpiente emplumada que representaba el orden, buen trato y bienestar. Su opuesto era Tezcatlipoca un espejo que humea representando el caos y la maldad. Estos dioses representaban la vida y la muerte respectivamente.
Los Toltecas le rendían culto a deidades que representaban algún beneficio obtenido de la naturaleza, como ser los dioses de la lluvia, cielo, tierra, viento, luna y sol.
Desde el año 667 d.C. los Toltecas se transformaron en una sociedad monárquica. El pueblo tolteca tuvo 7 Supremos Gobernantes entre el año 667 y 1052 d.C. ellos fueron:
- Chalchiutlannetzin, quien gobernó desde el año 667 hasta el año 719 d. c.
- Ixtlicuechahuac, gobernó desde el año 719 hasta el 771 d. c.
- Huetzin, esté gobernó durante los años 771 hasta el año 823 d.c.
- Totepehue, gobernó durante el año 823 hasta el año 875 d.c.
- Nacaxoc, gobernó desde el año 875 hasta el año 927 d.c.
- Mitl, gobernó desde el año 927 hasta el año 976 d. c.
- Topiltzin, gobernó durante los años 1031 hasta el 1025.
Su economía estaba basada en la agricultura, la elaboración de artesanías, el comercio y de los pueblos que conquistaban, a los cuales les sacaban sus materiales, tierras, joyas y prisioneros que luego eran convertidos en exclavos.
Organización social
La cultura Tolteca tenía una estructura de sociedad bien definida, en primer lugar estaba el Supremo Gobernante, ya que era considerado como una deidad y sus ordenes eran indiscutibles. Esta figura del líder se llamaba Tlahtoque en Tolteca.
Al Supremo Gobernante le seguían en la escala social los sacerdotes y guerreros. Los sacerdotes eran los encargados de los ritos y ceremonias muy importantes para el pueblo, manteniendo siempre la tradición y costumbre de sus leyendas y rituales. Los guerreros se ocupaban de la defensa de esta cultura, la de sus tierras y honor, luchando también por más tierras para expandir su territorio.
Luego seguían en la organización social la clase servil que eran quienes cumplían largas jornadas de trabajo haciéndose cargo de la agricultura para alimentar a todo el pueblo. Entre ellos también se encontraban los carpinteros, artesanos y otros trabajadores que eran necesarios para la economía del pueblo.
En el último escalón se encontraban los esclavos, que eran tomados de los pueblos que iban conquistando. Los esclavos no tenían ningún derecho ni valían nada, eran una mano de obra maltratada y no los alimentaban correctamente.
Lengua y escritura
El idioma que hablaban los Toltecas era el Náhuatl, considerada la lengua materna de todas las civilizaciones mesoamericanas. Esta lengua aparece en el siglo VII. La escritura pictográfica fue muy bien utilizada por los Toltecas, utilizando consonante y vocales, lo que realizaba sencillo formar y comprender las palabras.
El idioma Náhuatl tuvo tres variantes con el paso del tiempo. El Náhuatl central en la zona de Hidalgo, Tlascala y Centro Sur de Puebla. El Náhuatl Oriental se desarrolló en el Noroeste de Puebla, Veracruz y el Sur de Guerrero. Por ultimo el Náhuatl Occidental utilizado en el Norte de Guerrero, Jalisco y Durango.
Las escrituras que se encontraron de los Toltecas en general se trataban de asuntos cotidianos del mundo que habitaban, por lo cual la mayoría de los símbolos hallados eran de objetos, paisajes, rituales y aspectos culturales que utilizaban cada día.
Arquitectura del pueblo Tolteca
El pueblo Tolteca fue destacado en arquitectura en el siglo IX en la región Mesoamericana. Utilizaron diseños antropomorfos en sus columnas y esculturas, focalizándose en los detalles decorados para sostener el techo de los ambientes.
Los diseños arquitectónicos de los Toltecas han sido encontrados en el Templo del Dios Alba, llamado Tlahuizcalpantecuhtl. Otro aporte arquitectónico fue encontrado en las columnas que le realizaron al Dios Quetzatcóatl, su mayor figura religiosa.
La población Tolteca era numerosa, teniendo en cuanta que llegaron a tener solo en Tula aproximadamente 30.000 habitantes. Esto fue motivo para tener grandes complejos y asentamientos, que eran casas de una sola planta, divididos por dentro y sus techos y paredes eran adornados y acabados con adobe. Al ser la religión muy importante para ellos dentro de sus casas debían contar con un altar en la zona central, alrededor del altar se ubicarían las habitaciones, cocina (con horno de cerámica) y el lugar de almacenamiento e alimentos.
Las clases de viviendas eran de acuerdo al lugar que se ocupara dentro de la organización social. Las casas más grandes eran para personas de jerarquía, seguían las casas residenciales que eran más pequeñas y los palacios donde vivía el Gobernante Supremo, los sacerdotes y guerreros.
Actualizado el 7 junio, 2024