Bachué o Madre Bachué, es una figura de la mitología urbana colombiana, madre del pueblo Muisca, se considera una figura muy tradicional y folclórica, hasta el punto de considerarla como la transformadora de los pechos con que se alimentó el pueblo Muisca; estuvo unida con otra figura mitológica llamada Qhuza. Conoce más de esta figura leyendo este artículo.
Origen de Bachué
Se le considera la madre primigenia del pueblo Muisca, es su creadora, considerada la diosa de las fuentes de agua, tales como manantiales y arroyos, es muy bella y esbelta que emergió de la laguna de Iguage (Boyacá, Colombia), portando en sus brazos un niño, luego se sentó a esperar que creciera y cuando alcanzó la edad adulta tuvieron muchos hijos, los que se conocen como los Muiscas.
Bachué comenzó a enseñar los preceptos de la paz y convivencia a los primeros pobladores, asimismo los enseñó a cazar, a cultivar, respetar todas las leyes y sobretodo adorar a los dioses. Al ser considerada como la diosa principal y madre de los Muiscas, ella les otorgó toda su benevolencia y bondad, para que pudieran crecer como pueblo, llegaron a llamarla “Furachoque” (Mujer Buena).
Pasado el tiempo, pobló el mundo dejando sus enseñanzas, luego regresó con su compañero para convertirse ambos en serpientes y morar en la laguna de Iguaque, a partir de allí los Muiscas consideraron a Bachué como la diosa primigenia de su mundo, rindiendo culto junto a su esposo, actualmente en la población de San Pedro de Iguaque. (Ver articulo: Creación del mundo)
Leyenda
Las versiones sobre la leyenda de la creación del mundo se reflejan en la forma como los hijos después de crecer , se relacionaron con Bachué, de manera que en cada parto nacían entre cinco, seis y hasta siete hijos; todos comenzaron a instalarse en la sabana y después se dispersaron por todo el territorio Chibca. Junto a sus hijos poblaron todos los territorios que pudieron, allí Bachué les enseñó a tejer, construir bohíos y casas, amasar el barro, cultivar y procesar los metales, en tanto que su esposo les enseñó a los varones el arte de la guerra, convirtiéndolos en guerreros que valoraran la vida.
Posteriormente, cuando Bachué observó que la tierra estaba totalmente poblada, se dispuso a regresar a la laguna de donde había venido, junto a su esposo se lanzaron al agua y desaparecieron para siempre, para entonces la laguna se convirtió en un lugar sagrado donde se le rinde tributo y se realizan ceremonias en su honor.
Lo curioso de esta leyenda e el desconocimiento del nombre del consorte de Bachué, en la tradición de los Chibcha se ha mantenido el matriarcado como forma estructural de conformación social, las mujeres son consideradas madres y maestras, son las regentes y organizadores de toda la conformación estructural de los pueblos Muisca. (Ver articulo: Perchta)
Algunas crónicas
Historiadores y cronistas han observado y llevado a los libros las secuencias sobre una coronación que se realiza en las altas montañas y cumbres de la zona de Iguaque, esta ceremonia está basada en su relato donde una mañana apareció una luz que fue creando todas las cosas de la tierra, en ese momento apareció Bachué, que también era llamada Furachonga (Mujer buena), portando a las criaturas que posteriormente se convertirían en los pobladores de la tierra y que serían llamados Muiscas.
Todo el rito se hace en función de esta leyenda, donde mujeres llevan en sus brazos a pequeños que asemejan los hijos de Bachué, incluso realizan la forma como fue poblada la tierra, llevándolos y enseñándolos por todo el lugar. Al final se observa el regreso de manera alegórica de la diosa a la laguna de Iguaque, de manera que la tradición ha mantenido el proceso de creación de la tierra por muchos años, estos cronistas han intentado a través de sus textos, fomentar este tipo de cultura ancestral, dentro de la mitología urbana colombiana.
Datos de interés
La forma en la cual la diosa Bachué engendró a sus hijos para formar el pueblo Muisca es muy variada, diferentes relatos describen este hecho de una manera diferente, algunos dicen que el ya venía con ella cuando emergió del agua, otros dicen que los sacó de su mano y ya tenía tres años, junto a él bajó a la región de Boyacá y construyó su primera choza, además se dice también que ella viajaba por todas partes con su hijo esposo.
Solamente existe un relato donde explica las últimas palabras que Bachué le dijo a sus hijos antes de partir, “Promuevan la paz y la armonía, luchen por mantenerla”, según esta leyenda de allí no se supo más de esta diosa, sin embargo otros relatos indican que posteriormente regresó a la tierra en forma de s serpiente junto a su esposo.
Actualizado el 7 abril, 2020
