Descubre todo sobre Abeona, una diosa protectora.

Dentro de la mitología romana encontraremos a la diosa Abeona, una de las deidades protectoras de todo aquel que deseaba realizar su partida a un viaje, todos los viajeros se encomendaban a ella, pues la diosa cuidaba de que no le pasase nada malo a ninguno de estos mortales estando solos. Esta diosa pertenecía a los di indigetes, dioses romanos indígenas.

Abeona

Abeona para los romanos.

Esta diosa pertenecía a las más antiguas figuras y deidades de la mitología romana, fueron de los primeros dioses que los mortales llegaron a adorar, por ello están en la clasificación de los dioses indígenas (di indigetes), los cuales eran descritos como dioses abstractos, un tanto desconocidos para el hombre, de los cuales surgió mas a futuro el sincretismo.

El sincretismo aplicado en deidades se refiere a la unión de creencias distintas fusionándoles para hacer de ellos una misma, en este caso lo que hicieron con muchas de las primeras deidades que existieron, teniendo así múltiples semejanzas entre la mitología romana y griega, como con otras mitologías.

Abeona era la diosa encargada de proteger a todo aquel que emprendía un viaje, comprendiéndose así no solo a los viajeros que partían de sus regiones en barcos a otras partes del mundo, sino también a cualquier viaje que puede abordar la vida de un mortal. Por ello se dice que protegía también a los niños cuando se iban por primera vez solos de cada, sin el cobijo de sus padres, Abeona se aseguraba de brindarles seguridad.

Se encargaba de salvaguardar la vida de los mortales que le adoraran, por ello toma lugar entre las diosas protectoras. Esta diosa tenía cierto afecto por los niños que necesitaban de su cuidado.

Di indigetes.

Los di indigentes, dioses indígenas, fueron las deidades romanas que no fueron tomadas por otras mitologías y reinstauradas. Estos eran los más antiguos, que se fijaron en oposición a las nuevas tradiciones y creencias mortales. A pesar de esto el termino indiges, solo se presume que significa indígena, pero realmente se desconoce un significado literal.

Este término surgió del latín, haciendo referencia a dioses primordiales como el Sol, el dios Júpiter de Lavinio y Atenas. Se cree que estos dioses hacían referencia al primer conocimiento de divinidades que tuvo el hombre. La mayoría de estos no fueron plasmados dentro de la mitología moderna, sino que permanecieron con su única existencia en la antigüedad. Sin embargo, no por ello se desconoce de la existencia de estos dioses.( ver articulo: Dios júpiter en la mitología)

La mayoría de los primeros dioses que se llegaron a conocer, nacieron como deidades menores con poca relevancia y más bien relacionados a partes de la naturaleza, pero a pesar de esto fueron de gran adoración para los mortales. De la mayoría de estos dioses no se conocen descripciones exactas, pues eran presencias abstractas con pocas cualidades significativas que les pudiesen dar reconocimiento.

Algunos de las deidades indígenas romanas de las que aun en la actualidad se ha logrado conservar su conocimiento por los papeles importantes que representan son:

  • Ops, la diosa de la fertilidad y la tierra.
  • Jano, el dios de los comienzos, representación de las puertas y portales, relacionado con las transiciones en la vida.
  • Quirino, este ultimo sumamente parecido a Jano, perteneciente de otras regiones de la antigua roma.

Contrario a como sucede en la mitología clásica, mas la griega que la romana, entre los dioses indígenas las primeras deidades que existieron fueron femeninas, e incluso a lo largo de su historia la mayoría eran de este mismo sexo. Sin embargo, con la perdida de información no se puede hablan con exactitud de estas. Aunque si podemos resaltar que aun en la mitología romana predomina el sexo femenino, aunque estas deidades no sean las de mas reconocimiento.

Para conocer mas sobre la historia de los dioses romanos:

Abeona y Adeona.

Como Abeona es diosa de la protección de los niños y personas que emprendían un viaje, Adeona es su diosa complementaria, que compartía parte de la protección, brindándoles a todos los viajeros una segura vuelta a sus hogares. Esta última diosa también era parte de los dioses indígenas.

Juntas ambas diosas formaban la perfecta representacion de la protección total para los mortales que deseaban realizar viajes en sus vidas pero durante estos poder contar con el cuidado de deidades mayores. Los hombres confiaban sus vidas en los dioses que adoraban con el fin de recibir sus favores para tener vidas prosperas. También se les conoce como las diosas del salir y del entrar, la primera siendo Abeona y la segunda Adeona.

Actualizado el 18 mayo, 2018