Dentro de la amplia y variada mitología japonesa encontramos un gran número de seres sobrenaturales, entre ellos están los Goryo, son fantasmas que tienen un espíritu vengativo y que, de acuerdo a las leyendas, tuvieron su origen en la clase aristocrática japonesa de la época, en esta lineas se explicarán alguno de los aspectos relevantes de estos fantasmas.
Origen de los Goryo
Como se adelantó en el párrafo previo, los Goryo son una especie de fantasmas japoneses, o yūrei. De acuerdo a la mitología japonesa, los yūrei son fantasmas conformado por los espíritus de personas fallecidas que se encuentran vagando por el mundo debido a la forma en la que murió la persona, la falta de una ceremonia de entierro o el no cumplimiento de un determinado ritual, o por haberse suicidado. (Ver artículo: Nopperabo)
Existen varios tipos de yūrei, siendo los Goryo uno de ellos. Estos fantasmas son calificados como vengativos, ya que se dedican a atormentar a las personas que, en vida, le infligieron daños. De acuerdo a las creencia, los Goryo son los espíritus de personas que, en vida, fueron miembros de la clase aristocrática japonesa.
Así, se creía que la condición social y económica de una persona en vida, transciende después de la muerte, es decir, quien en vida era un aristócrata, después de la muerte conservará esa condición. Es posible que el surgimiento de estas criaturas se remontan al período Hein, el cual abarcó los años transcurridos entre el 794 y 1185.
El vocablo Goryo, está conformado por dos kanjis – palabra utilizada para designar a los caracteres de la lengua japonesa – el primero, 御, que significa “honorable” y el segundo, 霊 que puede ser traducido como “alma” o “espíritu”, es decir, la palabra puede, literalmente, ser traducida como “espíritu honorable” o “alma honorable” y probablemente se deba a la condición social que estos espíritus poseyeron en vida.
Descripción y carácter
Las primeras menciones que se conocen de los Goryo, los refieren como seres peligrosos, cargados de odio y que tienen una sed de consumar su venganza contra las personas que, en vida, conspiraron o le infligieron daño.
De acuerdo a los materiales consultados para este artículos, en vida, estos espíritus eran miembros de las clases más altas japonesas, y, normalmente, ejercían cargos políticos, en el ejercicio de los cuales sufrieron algún tipo de humillación, falsas acusaciones o, sufrieron un estado de perturbación mental tal que, al momento de su muerte, su espíritu comenzó a vagar por el mundo, buscando vengarse de sus victimarios.(Ver artículo: Yurei)
Como la vida de la persona terminó debido al daño sufrido por parte de una o de un grupo de personas, los Goryo tienen como objetivo vengarse de ese grupo determinado de personas, lanzando sobre ellos una serie de maldiciones, plagas y desastres naturales.
Poderes
Las leyendas e historias que han moldeado a los Goryo a lo largo de la historia, le han atribuido una gran variedad de poderes a estos fantasmas o espíritus honorables. El poderío o fuerza de cada Goryo, venía determinado por el poder que ostentó en vida, así, mientras más poder político o económico se poseía en vida, mayor sería el poder que el espíritu, una vez convertido en Goryo, poseería.
De esta forma, estos fantasmas eran capaces de generar inundaciones, sequías, incendios y una gran variedad de desastres naturales; tenían la capacidad de generar graves y largas hambrunas, guerras civiles y conflictos políticos. Los japoneses creían que, todos los períodos de hambrunas, sequías o conflictos severos que generaron inestabilidad política y social, eran responsabilidad de los Goryo, quienes fijaban su venganza sobre los pueblos y personas de las cual recibieron malos tratos. (Ver artículo: Kitsune)
Para poder calmar la sed de venganza de los Goryo, los japoneses buscaron la colaboración de los Yamabushi, una especie de monjes de una de las ramas budistas, que se cree poseen una serie de poderes sobrenaturales, quienes ejercieron como intermediarios con los Goryo, para encontrar la forma de cesar los ataques que este provocaba.
De esta manera, las personas que detentaron el poder político en la época consideraron esencial atender los asuntos referidos a los eventos generados por el Goryo, construyendo templos, entregando ofrendas e incluso haciéndoles merecedores de títulos nobiliarios, todo ello con la finalidad de buscar calmar su sed de venganza y permitir la gobernabilidad.
Estas constantes dádivas, buscaban además permitir la transformación de los Goryo en espíritus protectores de la clase política, ayudando a defender los territorios o sustentando una determinada causa impulsada por los políticos gobernantes.
Para poder entrar en contacto, fueron empleadas una serie de herramientas como la adivinación, rituales chamanicos o incluso, la necromancia. Asimismo, se cree que el objetivo de los Goryo, a través del despliegue de todo su poder sobrenatural, era obtener el reconocimiento y admiración que se les negó en vida, por ello las personas recurrieron a la religión para poder calmarlos y obtener sus favores.
Sugawara no Michizane
Sugawara no Michizane fue un político, poeta y escritor japonés miembro del clan Fujiwara, un poderoso grupo que dominó Japón durante gran parte del período Hein, que fue asesinado en un complot organizado por personas enemigas del clan Fujiwara.
Después de su muerte, la capital del imperio japonés fue azotada por una serie de tormentas, incendios y pérdidas de grandes extensiones de cosechas, a la vez que destacados lideres políticos morían en extrañas circunstancias. Ante estos hechos, la corte llegó a la conclusión que todos estos acontecimientos eran generados por el fantasma de Mihizane.
Con la finalidad de poder calmar la molestia de este Goryo, el emperador decidió otorgarle honores y asensos a este espíritu e incluso llegó a ascenderlo al grado de deidad celestial, ordenando construir un templo en la ciudad de Kitano. Finalmente, este Goryo se convirtió en el dios de la caligrafía, de la poesía y de las víctimas de la injusticia.
Actualizado el 2 agosto, 2018
