Briareo: Todo lo que debes saber

Briareo en la mitología griega representaba a un gigante de cien brazos y cincuenta cabezas, también llamados Hecatónquiro. Este ser mitológico era uno de los hijos del titán Urano y la diosa primigenia Gea, hermano también de los dos otros gigantes, Coto y Giges.

Significado de Briareo.

Briareo, en griego escrito “Βριαρηος Briarêos” significa propiamente fuerte. El tipo de gigantes pertenecientes a los Hecatónquiros que también son llamados Centimanos, son como su nombre lo indica especímenes de cien brazos. Los tres que existieron en la mitología griega fueron hijos de Gea y Urano.

El papel de los hecatonquiros llegaría a alcanzar una enorme relevancia histórica dentro de la narrativa de lo que se conoce como el mito del origen de la creación (mitología griega). No solo su encarcelamiento y posterior liberación por medio de la ayuda de la laguna Estigia (una de las oceanides más importantes) sino su participación dentro de la Titanomaquia.

La Titanomaquia fue una lucha que se dio entre los olímpicos y los titanes y llego a su desenlace gracias a un plan que involucraba la liberación de los ciclopes y  hecatonquiros y la colaboración de Poseidón y las armas que todos estos habrían conseguido. Esto situaría a los hecatonquiros en una gran posición de honor dentro de la mitología clásica (mitología griega, específicamente) y le daría la victoria en la Titanomaquia.

Como una medida preventiva de parte de su padre, fueron enviados al Tártaro, de donde los rescató Crono (hijo también de Urano y Gea), en busca de su ayuda para derrocar a Urano. Briareo, junto a sus hermanos, en busca de venganza decidieron ayudar al titán, quien una vez que logró su cometido los desterró al Tártaro una vez más, protegiendo que no escapasen por Campe, una de las criaturas de inframundo.

Fue liberado por Tetis y llevado con ella al Olimpo para servirle de ayuda a Zeus, quien amenazado por Atenea, Hera, Poseidón y otras deidades, se encontraba encadenado puesto que los otros dioses deseaban conseguir su poder en el Olimpo. Así, la presencia de Briareo, quien se encargó de liberar a Zeus, también sirvió como control para el caos. Los dioses no pudieron hacer nada para abatir al gigante.

Briareo fue un fiel aliado de Zeus, tanto que el gigante batalló de su lado durante la Guerra de Titanes. Por estos motivos fue recompensado por Zeus y Tetis, quienes le proporcionaron una esposa, Cimopolea, hija de Poseidón y Anfítrite. Es una diosa con el control de todas las tormentas del mar, incluyendo gracias a su padre cierto control de este. Casados, Briareo y Cimopolea vivieron en un palacio en el río Océano. Con esta diosa concibió a dos ninfas, nombradas Oiolica y Etna.

Menciones a Briareo

Bien ningún papel dentro de la mitología griega es irrelevante, muchas veces los historiadores olvidan a estos seres y su importancia dentro de la participación que tienen dentro de la titanomaquia y demás episodios de la mitología clásica (mitología griega, especificamente). De entre estos  hecatonquiros destacaría uno de ellos, de nombre Briareo, y por ende su mito es más estudiado particularmente que el de los hecatonquiros en general.

Las dos primeras menciones importantes hacia Briareo se hacen primeramente,  uno de los reconocidos libros de mitología griega, La Ilíada de Homero, aunque llamado por otro nombre el cual es Egeón y descrito por Homero como hijo de otros padres, Éter y Gea. Se concuerda que sigue siendo una mención a estos gigantes de cien brazos. A pesar de ser una criatura de la mitología griega, es bien conocida de manera ajena a la mitología.

 

 

Aristóteles llega a asegurar que las bien conocidas “Columnas de Hércules” no fueron nombradas así en un principio, sino por la grandeza y contextura de este gigante, fueron nombradas en su honor “Columnas de Briareo”, sin embargo, luego de que Hércules se volviese glorificado por los hombres al haber purificado tierra y mar, el nombre se cambió.

Tal es su fama que en la reconocida novela española El Quijote, de Miguel de Cervantes durante el Capítulo VIII Don Quijote compara a los grandes molinos de viento con Briareo: “Pues, aunque mováis más brazos que los del gigante Briareo, me lo habéis de pagar”.

Además, también hay otra mención de este personaje en el famoso poema de La Divina Comedia de Dante, dando un ejemplo en el canto del Purgatorio el poeta escribe:

“Vi al Briareo con mortal herida,

por el rayo celeste fulminado,

y su gran forma en hielo convertida;

y a Palas y a Timbren, y Marte armado,

ver con Jove los miembros palpitantes

de titanes, en campo ensangrentado”.

 

 

Actualizado el 3 abril, 2020