las 7 potencias africanas

Las 7 potencias africanas: significado, oraciones, veladora y más

Al hablar de las 7 potencias africanas hacemos referencia a las deidades que encabezan el culto del Panteón Yoruba, bajo la figura de los Orishas, las cuales son objeto de culto y veneración por parte de los iniciados en la santería y a los cuales se les relaciona a un determinado elemento de la naturaleza y a una simbología que pasaremos a conocer a continuación.

Significado

El comercio transatlántico de esclavos africanos trajo como consecuencia que éstos trajeran consigo todo su sistema de creencias religiosas, que debieron ser asimiladas en el Nuevo Continente bajo la figura de sincretismo religiosa, con figuras propias del catolicismo español.

Siendo así es importante destacar que dentro del complejo sistema de creencias que caracteriza la mitología yoruba, cada uno de los Orishas que componen el Panteón Yoruba, que ofrece una concepción mágico-religiosa de todos y cada uno de los componentes de la naturaleza.

Esto origina que cada Orisha adorado dentro del grupo de las 7 potencias africanas, sea asociado con un determinado elemento de la naturaleza, que va desde el fuego, el mar, los ríos y hasta los parajes de la sábana, todo ello con el fin de hacer una adoración del Universo en su totalidad creado por el gran Olodumare.

Historia

Para conocer la historia que gira alrededor de las 7 potencias africanas, es importante remitirnos a los Patakies que recogen la tradición oral de la cultura yoruba, con el fin de transmitirla de generación en generación; de esta manera es posible conocer cómo se fue conformando el Panteón Yoruba tal y como lo conocemos actualmente.

En un primer momento tenemos que Olodumare, como máxima representación del Dios regente del destino de los seres humanos, ordenó la creación del Planeta Tierra y la multiplicación de los seres para que poblaran el territorio creado, apoyándose para esto en Olorúm -dueño del cielo- y de Olofi, quien es jerárquicamente quien encabeza todo el conocimiento de la religión lucumí, a través de su tablero y como el máximo Orisha.

¿Quién es Olofi y que representa dentro de la mitología yoruba?

Desde la visión de la mitología  yoruba, Olofi forma parte de la trilogía primigenia, junto con Olodumare y Olorum, en la creación y conformación del mundo, éstas entidades espirituales se consideran que son el fin y el principio de todo lo creado, aplicando el sincretismo católico español que suele aplicársele a las religiones africanas, éstos hacen referencia a la Santísima Trinidad conformada por: El Padre, El Hijo y el Espíritu Santo.

De acuerdo a los Patakies de la conformación del mundo se observa que éste, al no entrar en relación directa con los seres humanos, afianzó una especial relación con Orula, con quien tiene contacto directo y a quien le reveló los designios acerca del destino de los hombres, a través de los secretos la adivinación plasmados en su tablero.

Se afirma también que fue Olofi el encargado de otorgar a cada Orisha su Ashe, que hace referencia a la carga energética que posee cada uno sobre los elementos de la naturaleza; el sacerdorcio de Olofi sólo está reservado a los muy pocos Babalawo que adquieren el rango espiritual de Babalawos Olofistas

El Ashé otorgado a los Orishas: La conformación de las 7 potencias africanas.

Esta primera trilogía de máximas deidades del Panteón Yoruba, ordenan a Orula que haga acto de presencia en la Tierra, pues a éste le había sido conferido el don supremo de la adivinación, sino que correspondía a éste también dictar a todos los Orishas los elementos de la naturaleza que regirían.

Con la misión entonces de poblar la Tierra aparece Obatalá como padre de todos los Orishas y forma parte de los Oshas de cabecera que son recibidos por los iniciados a través de la ceremonia de Kariosha, junto con: Yemayá, Oshun y Shangó, asociados a los elementos del mar, los ríos y el fuego, respectivamente.

Junto con estos Orishas de fundamento, mencionados anteriormente, se le suman: Babalú Aye, Oya y Oggun, conformando con estos últimos, lo que dentro de la mitología yoruba se conoce como las 7 potencias africanas, pasemos entonces a conocer cada una de estas entidades del Panteón Yoruba.

Eleggua- ¡Layoré, Eleggua!

A los iniciados en la religión yoruba, Eleggua les da la bienvenida, pues es a éste a quien corresponde abrir o cerrar los caminos que conducen a Ifá, por lo cual la consagración ante Eleggua resalta como una de las primeras ceremonias celebrada por los iniciados.

Eleggua, a su vez es considerado como uno de los orishas guerreros, de allí que pese a que sea representado con la figura de un niño -Santo Niño de Atocha, en el sincretismo católico- sea muy respetado y temido por todos lo aleyos e iniciados.

Se considera que este mora en la sábana y los parajes del monte, siendo éste su principal guardián y custodio, refugiándose entre las rocas, elemento de la naturaleza al cual suele asociarse su simbología.

Obatalá – ¡Jekuá Baba!

Tal y como se ha indicado anteriormente, Obatala es el padre de todos los Orishas, pues esta misión fue encabezada directamente por Olodumare en pro de la habitación de los Orishas y los Omo Orishas en el territorio conformado.

A Obatalá, como máximo Orisha de la creación, se le asocia con las montañas, como uno de los elementos más resaltantes de la naturaleza, considerando que éste reside en la cumbre de las mismas.

Yemayá – ¡Omío Yemaya Omoloddé!

A esta Diosa del mar le fue encomendada la misión -junto a Obatalá- de dar vida a todos los Orishas, por lo que en su seno gestó a todos los integrantes del Panteón Yoruba. Se le asocia con la inmensidad del mar y de los océanos, por lo que su naturaleza imponente hace que sea asociado con la maternidad y fertilidad, atributos por los que generalmente recibe numerosas ofrendas como ochinchin, preparado con frutos de mar, y que destaca como la ofrenda típica por excelencia que es realizada a Yemayá.

Oshún – ¡Yalodde Yeyé Kari!

Regente del agua dulce, de los ríos y sus corrientes, Oshún se nos presenta como la Orisha del amor y la femineidad y sus atributos, como belleza, sensualidad, intensos sentimientos y pasión desbordada. Es la máxima representante de la esencia femenina.

Se le relaciona sentimentalmente con Shangó, como su segunda consorte y producto de esta relación, nacieron los jimaguas, los pequeños Orishas, representados por dos gemelos.

Dentro del Panteón Yoruba a la dulce Oshún es a la única que está permitido llegar directamente donde Orula, para pedirle protección y misericordia por todos los seres de la tierra, en especial por sus hijos, debido a la lealtad que siempre le manifestó a Orula, este le confirió el título de reina en el camino de Ifá.

Oya – ¡Jekua Jey Yansá!

A Oya le fue conferido ser dueña y señora del último lugar donde reposan las almas: el cementerio, lugar en el cual permanece vigilante a la espera de que Ikú traiga las almas que han abandonado el mundo terrenal. Es considerada la Orisha guerrera, pues combate mano a mano junto a Shango y a Oggun, con grandes destrezas en el uso de las espadas y en el arte de la guerra.

En la naturaleza es representada con los rayos y los truenos, por lo que su carácter indómito es capaz de desatar las más temibles tormentas, como expresión de su furia; la cual manifiesta también girando velozmente azotando sus nueve sayas multicolores.

Shangó – ¡Kaó Kabiesilé, Shango Alufina!

Uno de los Orishas más destacados y conocidos del Panteón Yoruba. Dueño de los tambores bata y del fuego. Shangó representa la masculinidad y la virilidad que acompaña a todos y cada uno de sus hijos. Se afirma que descienda de la dinastía de Odududa, uno de los creadores primitivos de la cultura y religión yoruba en Nigeria.

Los diversos patakies de la religión yoruba lo relacionan sentimental a Oshún, a Oya y a Obba; con la primera concibió unos gemelos, los pequeños Orishas conocidos como los jimaguas y con las dos últimas protagonizó tormentosas relaciones debido a su naturaleza carismática y parrandera.

Oggun – ¡Oggun Kobú Kobú, Aguanilé!

Es el Orisha del trabajo duro, del esfuerzo físico, de los metales y las cadenas, conforma junto con Shango y Oya el grupo de los Orishas guerreros; a su vez, comparte junto con Eleggua y Ochosi su morada en los parajes del monte. Tiene una importancia especial dentro de todas las ceremonias yoruba, pues así como se requiere el omiero de Osain para purificar las herramientas, es a Oggun a quien pertenece el cuchillo como herramienta con la cual se ejecutan los diversos sacrificios requeridos.

Babalú Aye – Jekúa Babalu ayé agrónica!

Su intervención en todo lo que son los procesos de curación de las diversas enfermedades que aquejan al ser humano, hacen que Babalú Aye -a través de su sincretismo católico con San Lázaro- sea uno de los principales orishas que se asientan al momento de buscar en la Santería, coronación de santos por salud.

Babalú Aye representa dentro de la religión yoruba esa dualidad presente entre la vida y la muerte, puesto que así como está relacionado a la salud del ser humano, también se estima que tiene una relación muy cercana con los egguns, Ikú y Oya, la diosa muertera del Panteón Yoruba, puesto que le correspondió criar y cuidar a los 9 hijos de ésta, personificados bajo la figura de egguns -muertos-.

Conocer brevemente la relación de cada uno de estos Orishas con los diversos elementos de la naturaleza, es lo que servirá de base para conocer la importancia al culto de las 7 potencias africanas dentro de la mitología yoruba, pues a través de esta poderosa invocación integral a las deidades del Panteón Yoruba, se invoca la presencia y protección de cada uno, para que trabajen en conjunto en favor del avance espiritual.

No dejes de leer este artículo sobre otro Orisha del Panteón Yoruba: Ori

Oración a las 7 potencias africanas – Protección integral en todos los ámbitos de la vida.

¡Oh, 7 Potencias que estáis alrededor del Santo entre los santos! Humildemente me arrodillo ante vuestro cuadro milagroso, para implorar vuestra intercesión ante Dios, padre amoroso que protege toda creación, animada e inanimada.
Os pido, en el nombre del sacratísimo y dulce nombre de Jesús, que accedáis a mi petición y me devolváis la paz de espíritu y la prosperidad material, alejando de mi casa y quitando de mí paso los escollos que son la causa de mis males, para que jamás puedan volver a atormentarme.
Mi corazón me dice que mí petición es justa, y si accedéis a ella, añadiréis más gloria al nombre bendito de Dios, Nuestro Señor, de quien hemos recibido la promesa de pedid y se os dará ¡Así sea en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo!
¡Oídme Changó! ¡Escuchadme, Oshún! ¡Atiéndeme Yemayá! ¡Mírame con buenos ojos, Obatalá! ¡No me desampares Oggún! ¡Seme propicio, Orula! ¡Intercede por mí Eleggúa! ¡Concédanme lo que les pido, por la intercesión de las Siete Potencias Africanas! ¡Oh, Santo Cristo de Olofín!, bendito seas por los siglos de los siglos.
Ashé.

De acuerdo a lo que hemos venido comentando a lo largo de este artículo, hablar de las 7 potencias africanas hace referencia a realizar la invocación de la presencia en conjunto de todas las deidades del Panteón Yoruba para pedir por la protección en todos los ámbitos de la vida.

Al invocar a los Orishas de cabeceras, a saber: Obatala, Yemaya, Oshún y Shango, estamos pidiendo no solo clarividencia y lucidez mental en la toma de decisiones (Obatala), sino que pedimos también a Yemaya, la gran madre del Panteón Yoruba, proliferación y protección de nuestra descendencia, por el bien de nuestros hijos nacidos o por nacer. De igual manera pedimos a Oshun éxito en nuestra vida personal y amorosa para que nunca nos falte el amor y a Shango que nunca nos falte su fuerza y gallardía para afrontar todos los problemas que se susciten a lo largo de la vida.

Y si de dinero se trata – Oración por el dinero y prosperidad de los negocios

En el nombre de Dios Padre,
del Hijo y del Espíritu Santo,
yo pido permiso y facultad
para trabajar en esta hora
y en este momento por vías espirituales
para invocar a las 7 Potencias
que estáis alrededor
del Santo entre los Santos.
Me arrodillo ante Ustedes
para implorar su intercesión
ante el Gran Poder de Dios,
Padre Amoroso que nos protegéis
invocando el Dulce nombre de Jesús.
Acceded a mi petición:
(hacer la petición)
y dadme la paz de mi espíritu
y la prosperidad material.
Changó defiéndeme de mis enemigos,
Ochún ayúdame a progresar,
Yemayá guía mis pasos,
Obatalá esparce bondad en mí camino,
Ogún no me desampares,
Orula propicia beneficio en mi futuro,
Elegguá poderoso intercede por mí.
Santo Cristo de Olofi
permite que tu sabiduría
llegue hasta mí,
cúbreme con el velo de tu gracia
y el resplandor de tu magnificencia.
Amén

Simbología de los colores asociados a las 7 potencias africanas.

Dentro de la religión yoruba, a cada una de las deidades que representan los Orishas, le es asignado un color determinado, que lo distingue en las diversas ceremonias y rituales y que identifica todas y cada una de las ofrendas recibidas por los iniciados, siendo así, a las 7 potencias africanas se les asocia con un gran gama multicolor, en representación de los Orishas.

De esta manera, a Obatala se le asocia siempre con el color blanco, debido a la pureza y claridad que brinda este Orisha a todos sus hijos y a que su morada reside en lo alto de las montañas, casi bordeando las nubes; por su parte a Yemaya le corresponde el color azul en todas sus tonalidades, debido a que su reino se encuentra en el mar y sus profundidades.

A la carismática Oshun, se le representa con el color amarillo, haciendo referencia al lujo y al boato que caracteriza a sus hijos; el rojo simboliza a Shango, cuya pasión y valentía lo hacen un digno merecedor de ese color, que comparte con Eleggua, quien lo alterna con el negro para diferenciarse de Shango.

A Oya le corresponde los colores oscuros, sin utilizar jamás en sus ceremonias u ofrendas el negro, pese a que su vestuario está compuesto por una nueve sayas multicolor, usualmente se le asocia con el color ocre; a Oggun se le otorgó el color verde alternando con el color negro, como una manera de distinguirlo de Orula, que alterna el color verde con el amarillo; por su parte a Babalú Aye, como protector frente a enfermedades y dolencias se le representa con el color morado.

El conocimiento de cada uno de los colores que representan a cada Orishas en su representación de las 7 potencias africanas nos permitirá conocer de seguidas uno de los rituales más conocidos para su invocación…¡Tan solo sigue leyendo!

Veladora de 7 colores para la invocación de las 7 potencias africanas.

Dentro de las diversas ceremonias celebradas dentro del camino de Ifá, es usual el uso de las velas -o veladoras- como una forma de agradar a los Orishas y a su vez invocar su presencia y protección, todo ello acompañado con la presencia del Babalawo como maestro de ceremonia, quien coordina los rezos y cantos que deben ser realizados en honor a los Orishas.

Siendo así, la veladora de 7 colores constituye entonces uno de los rituales más conocidos y comunes utilizados para la invocación a las 7 potencias africanas, su encendido representa una forma de presentarle ofrenda a los siete Orishas y su ritual es bastante sencillo.

Los iniciados en la religión, asesorados siempre por su padrino y demás hermanos de santo, colocarán frente al altar de los orishas un mesa cubierta con un mantel blanco, esta debe ser lo suficientemente amplia para que sobre ella coloquemos la veladora de 7 colores, que suele ser por lo general de tamaño mediano; junto a ella colocaremos un vaso con agua y procederemos a colocar, de acuerdo a nuestras posibilidades elementos a ofrendar que sean del agrado de cada Orisha.

 

Por ejemplo, no deben faltar en esta mesa tabacos, aguardiente, vino y caña clara, así como el imprescindible coco, que es común a todas las ceremonias de la Oshá. Una vez hecho esto procederemos a colocar una porción de batata, como ofrenda a Obatalá; piña y patilla, para Oshún y Yemayá, respectivamente; maíz tostado para agradar a Oggun, pudín de chocolate dulce favorito de Oya y así iremos colocando ofrendas hasta lograr que la vela se consuma en su totalidad.

Durante el tiempo que esta permanezca encendida, puede ser un buen momento también para ofrecer las diversas Ewe -hierbas- de Osain, como manera de complementar las ofrendas realizadas y con el fin de preparar el omiero, con las diversas hierbas de cada Orisha, para limpiar cada una de las piezas utilizadas durante la celebración de este ritual.

Para purificar el ambiente – Incienso de las 7 potencias africanas.

Dentro de todas las ceremonias mágico-religiosas, son utilizadas una serie de elementos que permiten equilibrar todas las vibras energéticas de los lugares donde son celebradas; siendo así, no es de extrañar la implementación en estas ceremonias de un elemento cuyo uso se remonta a las milenarias culturas orientales: el incienso.

Dentro de la invocación a las 7 potencias africanas, el uso del incienso es integrado como un elemento que acompaña los cánticos, rezos, ofrendas, velones y bailes, pues espiritualmente se considera que su encendido, contribuye a purificar el ambiente, lo que es capaz de producir un cambio en la atmósfera a través de un equilibrio enegético que contribuye a que los Orishas “bajen” y se hagan presente frente al Babalawo y todos los miembros de la casa de santo.

La imposición de collares de las 7 potencias africanas.

Dentro del camino de Ifá y la Regla de la Osha, la imposición de collares -ekeles- constituye uno de los rituales de iniciación básicos dentro de esta religión, estos son entregados a los aleyos durante la celebración de la ceremonia de la Kariosha -coronación de santos- luego de ser purificados y consagrados por el Babalawo y demás participantes en la ceremonia.

En la elaboración de estos collares participan las mujeres, como apetebí de Orula, quienes se encargan de elaborar cuenta por cuenta cada uno de los collares, con los colores alegóricos de cada Orisha, su importancia radica en que se considera que, al usar los collares, en cada paso que des, los Orishas estarán contigo donde vayas, pues éstos se encuentran representados en los ekeles.

Por lo tanto, los padrinos orientan a los aleyos acerca del respeto que deben tener al momento de llevar puesto estos collares, de manera de no incurrir en el grave error de ofender a los Orishas con nuestras acciones, siendo asi, queda prohibido: sostener relaciones sexuales con los collares puestos; ingerir alcohol o drogas; asistir a hospitales, cementerios o permanecer en comisarías; participar en riñas o discusiones que pudiesen derivar en hechos de sangre. Siempre que se presenten estas situaciones, debes tomar la previsión de quitarte los collares, en la intimidad de un espacio cerrado, envolverlos en un paño blanco y colocarlos a buen resguardo.

El collar de las 7 potencias africanas resulta mucho más poderoso aún, pues cargarlo representa que donde vayas, todas las deidades del Panteón Yoruba están contigo, por lo que éste es elaborado con las cuencas que representan todos los colores representativos de cada Orisha.

Colonia para atraer buenas energías.

Alrededor del culto a las 7 potencias africanas se ha creado toda un red de comercialización de productos con el fin de que los creyentes, al buscar la protección de los Orishas, se conviertan en usuarios de consumo, de este tipo de productos.

De esta manera y en una mezcla -si se quiere incomprensible- de conceptos propios de la religión y mitología yoruba, con conceptos astrológicos, se crean las colonias esotéricas, con el fin de equilibrar desde el aura, hasta el espectro energético de los iniciados.

Estas son preparadas con una variada concentración de esencias, representativas de cada entidad espiritual y debe ser rociada diariamente sobre el cuerpo y promete crear un halo de protección frente al individuo tanto frente a desgracias como energías negativas.

Las 7 potencias africanas en el espiritismo ¿Ya no son los Orishas?

Existe un debate, al menos en cuanto al espiritismo venezolano se refiere, de considerar errónea la concepción de asumir que las 7 potencias africanas hace referencia a los Orishas del Panteón Yoruba; considerándose también reacios a toda la comercialización que se ha realizado en el culto a estas.

Esto debido a que se considera que al hablar de las 7 potencias africanas, se hace referencia a un grupo de 7 egguns -muertos- y en ningún momento debe asumirse que su mención hace referencia a los 7 Orishas del Panteón Yoruba.

En todo caso, debe tenerse en cuenta que dentro del camino de Ifá, las 7 potencias africanas es la interrelación de las deidades del Panteón Yoruba con la conjunción de todos los elementos de la naturaleza que representan y que no deben emitirse juicios que contraríen esta creencias, desde la óptica de otras prácticas religiosas como la Regla del Palo Monte en cualquiera de sus corrientes o del espiritismo.

Para seguir leyendo sobre la mitología yoruba, te invito a leer: Odde

https://www.youtube.com/watch?v=MwNwQoVU7z0

Actualizado el 11 julio, 2018