¿Quieres saber qué es Tupilaq? Apréndelo aquí

Los Tupilaq son considerados espíritus malignos que invocan los chamanes para que cacen y asesinen a sus enemigos, pero que tienen que usarlos con prudencia porque si su enemigo es más poderoso se puede convertir en vez de un aliado para ayudarte a aniquilar a tu enemigo, se vuelve en tu contra y el que resulta muerto eres tu, conoce más sobre cómo se crean y cómo funcionan.

Los Tupilaq

Los Tupilaq, o también conocido como Tupilak o Tupilait, son unas estatuillas extravagantes que tienen la finalidad de destruir o perjudicar a los enemigos de su creador, es decir, el chamán, considerados como espíritus malignos. Los Tupilaq sólo pueden ser moldeados y controlados por los chamanes, ya que ellos le proporcionan a la figurilla el poder destructivo.

Los orígenes de los Tupilaq provienen de la mitología Inuit (también conocida como la mitología esquimal y habitan en el noreste de Canadá, Alaska y en Groenlandia, su religión se basa en el chamanismo y el animismo, el cual es la creencia de que cualquier objeto, elemento de la naturaleza y animal poseen conciencia propia y un alma) . Los Tupilaq son consideradas unas criaturas monstruosas y vengadoras, cuando son creadas, el chamán los crea de tal manera que la figurilla sea intimidante para quien la vea. (Ver artículo: Chacana)

Tupilag

Estas estatuillas pueden ser parecidas a los Golem, que de igual forma, es el chamán quien los crea, para después de mandarlos a la misión donde desaparecen para cumplir las órdenes del chamán. Inclusive existen en la mitología Inuit unas estatuillas que son parecidas a los Tupilaq y se les conoce como los Inuksuit, aunque sus diferencias se deben a que este último es más como un motivo náutico, en cambio los Tupilaq se encargan de cobrar venganza por su creador.

Si nos referimos a la actualidad, nos encontramos con que los Tupilaq son parte importante para la cultura de la tribu Inuit (en específico para los Inuit que habitan en Groenlandia), ya que se han encontrado Tupilaq con tallados de diferentes formas y tamaños, hasta incluso con diferentes materiales, incluidos en esto la madera, la cornamenta del caribú (una especie de reno que habita por el hemisferio Norte), el colmillo de los narvales (especie de cetáceo que habita en el Océano Atlántico y los mares del Ártico, y se caracterizan por tener una especie de colmillo largo y se le conoce como el unicornio del mar).

Para los coleccionistas, las estatuillas de los Tupilaq son consideradas muy estimadas por sus orígenes, por su aspecto extravagantemente grotesco, por las historias que éstas tienen y la importancia en la mitología Inuit por ser considerados como espíritus malignos.

Fabricación y uso

Como ya se mencionó anteriormente, para poder construir a los Tupilaq hace falta un aprendiz que estudie el arte del chamanismo, la cual es la creencia y práctica de poder conectar el mundo espiritual con el mundo terrenal y relacionarlos, ayudando a determinar o curar enfermedades, e incluso podría causarlas, además de viajar entre los dos mundos; o un hechicero que con varios objetos como partes humanas como por ejemplo huesos de niño o de un adulto (los cuales el chamán tiene que extraer de una tumba).

También pueden agarrar pedazos animales, en el caso de los dos el chamán puede agarrar la piel, los huesos, tendones hasta los pelos. Para poder cobrar vida, el chamán se encarga de realizar un ritual, ya hecho esto el Tupilaq tiene que ser colocados en el mar para localizar y asesinar al enemigo.

Precauciones contra los Tupilaq

Aunque crear a los Tupilaq puede traer consecuencias graves, puesto que al mandarlo al enemigo, y este resulta ser un chaman y además posee poderes místicos más fuertes que su creador, el Tupilaq puede ser reprogramado para que vuelva a su creador y lo asesine, pero si esto sucede, existe una manera en que salga de esto el chamán, y sería hacer una declaración pública de la creación que mandó hacerle al chamán y a quien mandó a asesinar al Tupilaq.

Los Tupilaq son figurillas grotescas vengativas que si quieres vengarte de alguien, esta es la manera perfecta de hacerlo aunque como cualquier arma de caza y destrucción tiene que tener algunas consecuencias como que no es recomendado usarlo con gente mas poderosa que tú, además que para poder crearlo tendrías que agarrar restos de animales o de seres humanos (incluso niños) y conseguir un chamán para otorgarle vida y tirarlo al mar para que el Tupilaq encuentre al enemigo y lo asesine.

https://www.youtube.com/watch?v=E3ZvaED0xgY

Actualizado el 26 septiembre, 2018