Los nommos forman parte de la historia del grupo étnico de los dogón, que habitan la zona central de la República de Malí en África occidental. La historia que rodea a estos seres mitológicos está llena de polémica, debido a los conocimientos que, supuestamente transmitieron, a su llegada a la Tierra.
Los conocimientos astronómicos en poder de los dogones, desde hace siglos, han despertado el interés de los investigadores, quienes han intentado encontrarle una explicación lógica a sus hallazgos, ya que algunas de ellos solo fueron descubiertos luego de varios siglos y con ayuda de la tecnología.
Así, los dogones tenían conocimiento de la existencia de los planetas, que Saturno posee anillos, que la vía láctea está conformada por millones de estrellas o que los planteas describen una órbita elíptica alrededor del Sol. (Ver artículo: Arvales)
El hecho que esta etnia poseyera estos precisos conocimientos, ha despertado y generado una cantidad de teoría y leyendas. ¿Tuvieron los dogones contacto con alienígenas? Es parte de la creencia popular, y en ella, entran los nommos.
¿Quiénes son los nommos?
Los nommos son seres mitológicos, creados por el dios Amma que, de acuerdo a la leyenda dogón, llegaron a la tierra hace miles de años provenientes del sistema estelar Sirio, estrella binaria, conformada a su vez por dos estrellas que orbitan entre sí, llamadas Sirio A, denominado por los dogones como Sigu Tolo y Sirio B, llamada por estos Po Tolo.
Los dogones aseguran además, que existe una tercera estrella, denominada por ellos Emme Ya, cuya existencia aún no ha sido científicamente comprobada, de la cual provienen los nommos, quienes descendieron a la Tierra montados en una especie de embarcación roja y envueltos en fuego y truenos.
Debido a que no podían subsistir fuera del medio acuático, una vez llegaron a la Tierra, crearon un especie de lago o masa de agua, para poder meterse en ella.
El término nommo, en el lenguaje dogón, está relacionado con el agua y son usualmente descritos como anfibios, hermafroditas y en forma de pez, más que de humanos, razón por la cual son considerados por los dogones como los maestros del agua. (Ver artículo: Madre de Agua en Palo Mayombe).
Estas criaturas se encargaron de transmitir todo el conocimiento que tenían sobre astronomía a los dogones, quienes se encargaron de transmitirlo de generación en generación. Debido a sus características físicas particulares, es fácil encontrar similitudes entre los nommos del pueblo Dogón, y otras criaturas o deidades de otras civilizaciones antiguas.
Al ser descritos como anfibios, su existencia se asocia a las sirenas, seres mitológicos mitad pez y mitad humanos. Asimismo, el origen de la diosa egipcia Isis, está asociado al mismo sistema estelar de donde provienen los nommos.
Polémica y desmentidos
Marcel Griaule fue un antropólogo y etnólogo francés, que dedicó gran parte de su carrera al estudio del pueblo Dogon. Su trabajo consistió en documentar los supuestos conocimientos astronómicos de este pueblo,sin embargo, su trabajo, a pesar de haber atraído la curiosidad de muchos autores que popularizaron la leyenda que se ha detallado en esta líneas, ha recibido duras críticas y cuestionamientos.
Algunos antropólogos acusan a Griaule de haber malinterpretado, e incluso inventado, algunos aspectos de las creencias religiosas del pueblo, ya que no se encuentran evidencias que demuestren de forma fehaciente que los dogón adquirieron sus conocimientos hace miles de años y menos aún, que haya sido impartido por seres extraterrestres, en este caso, los nommos.
Los primeros reportes sobre los conocimientos sobre el sistema estelar Sirio, por parte de los dogo, se remontan a 1940, por lo que resulta perfectamente posible que los miembros de esta etnia hayan adquirido el conocimiento de antropólogos y científicos que, como Griaule, desde hace décadas centraron sus estudios en esta etnia africana.
Asimismo, los hallazgos modernos sobre el sistema sirio sugieren hasta ahora, que no existe ningún cuerpo o planeta que pueda sustentar ningún tipo de forma de vida, lo cual hace improbable que seres como los nommos, descritos como unos anfibios cuya existencia dependía del agua, haya si quiera existido.
De la misma forma, a pesar de existir una anomalía en la órbitas de las estrellas del sistema estelar Sirius, que podría sugerir la presencia de una tercer cuerpo, no ha sido confirmada de forma fehaciente la existencia de una tercera estrella, denominada por los dogón como Emme Ya y de la cual, presuntamente, llegaron los nommos.
Aunado a lo anterior, algunas de las teorías recibidas por los nommos, han resultado ser desmentidas por la ciencia moderna, entre ellas destaca que los dogón creían que Sirius B, ocupó el lugar que hoy tiene el Son en nuestro sistema solar, sin embargo, los físicos y astronómos son contestes en afirmar la falsedad de esta creencia.
En definitiva, la historia y origen de los nommos es polémica, la ciencia está enfrentada de forma directa a su existencia, cuestionando las creencias y conocimientos que, supuestamente, impartieron estos seres mitológicos a los dogón.
Actualizado el 21 julio, 2018
